miércoles, 19 de diciembre de 2007

Impaciencia. Rapido y mal.


Tengo algunas doncellas a las que asaltar,
de las que dejan en el balcón
alguna señal en espera de mis manos.

Tengo cientos, más bien cientos de millones
de palabras que me quieren todas las noches.

Tengo un barco esperandome a cada sueño.

Tengo un beso tuyo, en un bote para cuando lo necesite.

Tengo la tranquilidad de saber esperar.

Tengo la impaciencia que me dan tus ojos, aun teniendo ese beso.




Impaciencia.
Enseñame despacito, tu.

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